Manolo Guevara Diaz
Creditos a Newyork Times
Estados Unidos.-La guerra pública de Donald Trump contra las investigaciones que rodean su presidencia ha durado lo suficiente como para que ya no sea impactante.
Casi a diario, Trump se enfurece y les dice a sus 58 millones de seguidores en Twitter que el fiscal Robert Mueller está en una “cacería de brujas” y ha adoptado el lenguaje de los jefes de la mafia al llamar “ratas” a quienes cooperan con los abogados. Los aliados del presidente en el congreso estadounidense y los medios de comunicación conservadores advierten sobre un supuesto complot dentro del Departamento de Justicia y el FBI para subvertir a un presidente que fue elegido democráticamente.
Casi a diario, Trump se enfurece y les dice a sus 58 millones de seguidores en Twitter que el fiscal Robert Mueller está en una “cacería de brujas” y ha adoptado el lenguaje de los jefes de la mafia al llamar “ratas” a quienes cooperan con los abogados. Los aliados del presidente en el congreso estadounidense y los medios de comunicación conservadores advierten sobre un supuesto complot dentro del Departamento de Justicia y el FBI para subvertir a un presidente que fue elegido democráticamente.
Un análisis realizado por The New York Times [en inglés] revela la magnitud del ataque sostenido —y secreto— que Trump ha ejecutado en contra del sistema federal de justicia. Una serie de entrevistas con docenas de funcionarios gubernamentales (actuales y anteriores) y otras personas cercanas a la presidencia, así como la revisión de documentos confidenciales de la Casa Blanca, revelan numerosos episodios que no han sido divulgados durante este mandato.